Gigabyte lanza versiones sin disipador de sus SSD AORUS Gen4 junto a un nuevo modelo de 500 GB

El SSD Gigabyte AORUS NVME Gen4 fue uno de los primeros SSD con interfaz M.2 NVMe PCI Express 4.0 del mercado gracias a la cual es capaz de alcanzar velocidades de vértigo tal y como pudimos comprobar en nuestra review.

Formado por memorias BiCs de 96 capas Toshiba Memory (Kioxia ahora), una de las peculiaridades de este SSD es que venía de serie con un disipador de cobre para disipar el calor que podía generar en situaciones de plena carga. Este añadido se agradece en configuraciones normales de ordenadores de sobremesa, pero no tenía sentido en aquellas placas base donde ya se integra un disipador en los M.2 o en equipos portátiles, donde directamente no hay espacio para un disipador de ese tipo.

Pensando en este tipo de consumidor, Gigabyte ha lanzado unas nuevas versiones de los SSD AORUS Gen4 sin disipador. Se mantienen las especificaciones, con modelos de 1 TB y de 2 TB, además de añadir un nuevo modelo de 500 GB para los que no requieren tanto espacio.

El rendimiento sigue siendo superlativo gracias a sus memorias TLC 3D de Kioxia de 96 capas en 8 canales junto a una controladora PS5016-E16, y sus 512 MB, 1 GB o 2 GB de caché DDR4 para los modelos de 500 GB, 1 TB y 2 TB respectivamente. Todos ellos alcanzan 5.000 MB/s de lectura secuencial, pero la escritura varía dependiendo de la capacidad. De esta manera, el modelo de 500 GB ofrece 2.500 MB/s de escritura secuencial, el modelo de 1 TB sube hasta 4.400 MB/s y el modelo de 2 TB mantiene también esos 4.400 MB/s

En cuanto a acceso aleatorio, tenemos 750.000 IOPS de lectura y 700.000 IOPS de escritura en los modelos de 1 y 2 TB, y de 400.000 / 550.000 IOPS en el de 500 GB. Sus precios aún no se han desvelado, pero deberían ser algo más económicos que los modelos con disipador.

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